Qué pérdida de tiempo, pensó Julia. Su agente de seguros insistía en volver a reunirse. Sabía que sería otro aburrido lanzamiento de ventas, pero decidió aprovecharlo al máximo, buscando una oportunidad de hablar de su fe.
Al notar que el agente tenía las cejas tatuadas, le preguntó vacilante por qué,...
Estábamos llegando a casa cuando lo vi: la aguja de la temperatura del auto subía rápidamente. Cuando nos detuvimos, apagué el motor y bajé. Salía humo del capó y el motor hervía. Moví el auto unos centímetros y encontré un charco abajo: aceite. De inmediato supe lo que había...